sábado, 13 de septiembre de 2008

Dr.Craig Hogan y su libro Your eternal self: evidencias científicas de la trascendencia de la consciencia


El libro "Your Eternal Self", del Dr.Craig Hogan, es una recopilación actualizada de lo que el autor considera las mejores evidencias e investigaciones científicas que demuestran que la consciencia no depende en su origen del cerebro (aunque esté influida por él), sino que lo trasciende, lo que supone además la supervivencia de la consciencia a la muerte física.

Yo compré este libro hace unos meses, pero ahora me he enterado que el autor lo colocó gratis en su página web, por lo que cualquier persona puede leerlo.

Ya en otras ocasiones (como en este, en este otro y en este otro post) he comentado algo sobre estas investigaciones, cuando analicé parte del contenido de algunos libros referidos a dichos temas.

El libro de Hogan tiene algunas ventajas con respecto a los otros libros que he comentado:

-Ofrece muchas líneas de evidencias (ej: de medicina, psicología, parapsicología, estudios sobre las experiencias cercanas a la muerte, etc.), ofreciendo así un argumento acumulativo en favor de la tesis que intenta demostrar, desde muchos ángulos diferentes.

-Usa muchas referencias, que en sí mismas podrían ser examinadas por los lectores interesados en profundizar más sobre este tema.

-Ofrece información actualizada sobre estudios recientes.

-Examina algunos de los argumentos pseudo-escépticos más comunes.

Algunos aspectos negativos:

-El autor está convencido de que la evidencia realmente demuestra su tesis, lo que podría ser algo molesto para algún lector zetético que sea menos precipitado, y que tarde más en arribar a esa conclusión (ya que el zetético considerará interpretaciones alternativas como parte del proceso de evaluación y análisis). Sin embargo, hay que reconocer que algunas de las evidencias presentadas son en sí mismas bastante convicentes. Además, el autor recomienda una lectura crítica con mente abierta del material, e incentiva a que el lector busque información adicional por sí mismo.

-Pienso que el autor debió abordar con más detalle la discusión filosófica actual sobre el problema de la consciencia. Aunque esto puede ser justificado por el hecho de que el autor no es un filósofo, y su intención no es teorizar sobre estas cuestiones, sino ofrecer evidencia científica.

Pero aun así, en mi opinión este no es un tema solo científico, sino filosófico también, por lo que esto último no puede descuidarse. Una evidencia que apunte a la trascendencia de la consciencia inmediatamente nos exige reflexiones de tipo filosóficas (¿quien soy? ¿tiene mi vida algún sentido o finalidad trascendente? ¿Existo para algo? ¿Cuál será mi destino después de la muerte? ¿Soy un ser espiritual en un cuerpo físico, o simplemente soy pura materia que finge que tiene alma?)

Por otro lado, la idea de que la consciencia es inmaterial pero interactúa con un cerebro material plantea algunos problemas filosóficos, en especial: ¿Cómo una sustancia inmaterial puede interactuar con una sustancia material? Esta pregunta es el talón de aquiles del dualismo (que señala que la consciencia es una cosa, y el cerebro otra) y es lo que ha motivado en parte su rechazo filosófico, aunque no absoluto ni definitivo. Por otro lado, la dificultad para explicar filosófica o científicamente el "cómo" de algo, no siempre es razón suficiente para rechazar la existencia de ese algo (en caso de haber evidencias que apunten a su existencia), porque primero se constata la existencia del fenómeno y luego se formula su explicación (ej: la remisión espontánea del cáncer se ha constatado como un hecho en algunos casos, pero no hay una explicación aceptada y única de por qué se produce; lo mismo podría decirse del origen de la vida a partir de la materia inorgánica, lo que en parte ha llevado a algunos filósofos a cambiar radicalmente su filosofía; y otros ejemplos similares).

El meollo de la cuestión es que el carecer de una explicación para el fenómeno X, no es razón suficiente para pensar que X no existe o no puede existir; en especial, cuando se dispone de al menos alguna evidencia que sugieran su existencia, o la posibilidad de que exista.

-El libro tiene muchas páginas, por lo que puede ser difícil o incómodo de leer online. Por eso es recomendable comprar la versión en físico (está disponible en Amazon.com).

-Está en inglés, por lo que solo una fracción de todos los lectores de este blog podrán leerlo.

Al ser un tema tan controversial, pienso que lo más razonable es ofrecer la información para que sea sometida al escrutinio de cada uno de los lectores, y puedan arrivar por sí mismos a la conclusión que le parezca más razonable.

Mi opinión en este momento es que tales investigaciones realmente parecen apuntar a que "algo" trasciende o "sobrevive" a la muerte física; pero esto no puedo afirmarlo con absoluta certeza ni total convicción. Lo que creo es que, tomando en consideración todos los hechos y argumentos (incluyendo las críticas y objeciones pseudo-escépticas) y los mejores estudios al respecto, la hipótesis de que "algo" sobrevive a la muerte física parece ser la mejor explicación y la más parsimoniosa, ya que no tiene que refugiarse en especulaciones gratuitas y no comprobadas sobre fraudes, o descalificar personalmente a los investigadores como incompetentes, crédulos o ignorantes (al mejor estilo pseudo-escéptico ) ni forzar interpretaciones en una dirección preconcebida para poder explicar los hechos.

Pero aun en este caso, es posible que mi opinión esté equivocada; y a falta de una respuesta única y tajante que pueda ofrecerle a los lectores como "la verdad" (este es un blog para la reflexión, no para la predicación de dogmas), pienso que lo más razonable es dejar que cada uno se forme su propia opinión acerca de este controversial e interesante asunto.

Aunque esto esta de más decírselo a un zetético, que por su propia naturaleza piensa por sí mismo en su camino permanente de buscar y aproximarse a la verdad...